¿Por qué imprimir etiquetas con el sistema offset semirrotativo?

Las máquinas Brava 350 y 450 de Rotatek ofrecen la mejor relación calidad-precio del mercado

El sistema de impresión offset ofrece la mejor relación calidad-precio en la impresión de etiquetas, teniendo en cuenta los tres condicionantes principales que definen el mercado actual:

  • Tiradas cada vez más cortas.
  • Precios de venta marcados por la creciente competitividad.
  • Necesidad del impresor de obtener beneficio en cada trabajo.

Persiste en el sector la creencia de que el offset es demasiado complejo para trabajar con etiquetas, pero la realidad es que el sistema semirrotativo para impresión en offset húmedo, el que utilizan nuestras máquinas Brava 350 y 450 (esta con la posibilidad también de rotativo), agiliza todos los procesos. Ofrece la mejor calidad, sin necesidad de cambios de formato, y con materiales, tintas y consumibles estándar.

En comparación con la flexografía y la impresión digital, el offset semirrotativo atiende con total solvencia tiradas medias y cortas, y con los costes más bajos, cosa que permite ofrecer precios competitivos y un margen de beneficio adecuado para el impresor.

Veamos con más detalle las ventajas e inconvenientes de cada tecnología.

Flexografía

La flexografía es la tecnología más utilizada para la impresión de etiquetas adhesivas. Sin embargo, existen muchas variables que hay que tener en cuenta para lograr una buena calidad en los trabajos:

  • Características del polímero.
  • Tipo de adhesivo.
  • Tipo de rasqueta utilizada.
  • Volumen y estado del anilox elegido.
  • Transferencia de la tinta: la lineatura del anilox debe ser al menos seis veces superior a la del polímero.
  • Tipo de tinta (base agua, solvente o UV).
  • Material del frontal a imprimir.
  • Presencia de polvo en suspensión: se pueden incrustar partículas en el polímero y, por tanto, afectar a la impresión.
  • Ganancia de punto: es muy elevada, de forma que requiere un buen control de la preimpresión.

La flexografía exige un conocimiento a fondo del sistema para conseguir los mejores resultados. Desatender alguna de las variables apuntadas, repercutirá en la calidad de la impresión.

Sin duda, la flexografía tiene puntos a favor, como la buena cobertura de color y su estabilidad durante todo el tiempo de tiraje, el poco desperdicio que genera, la buena calidad de imagen en materiales no porosos, o la facilidad de acabados en línea. No podemos olvidar, sin embargo, que se trata de un sistema muy exigente, con desventajas competitivas como:

  • Costes de preimpresión elevados, sobre todo en tiradas cortas y de polímeros digitales de alta resolución.
  • La variedad de avances tecnológicos obliga a equipar la máquina con múltiples porta clichés o desarrollos de impresión.
  • Según el diseño de la imagen, puede existir la necesidad de imprimir un mismo color en dos grupos y, por tanto, configurar más grupos de impresión que los que requeriría una máquina offset.
  • Hay que invertir mucho tiempo en limpieza.
  • Riesgo alto de deterioro del polímero durante el tiraje, proporcional a las exigencias de definición y lineatura.
  • Los tiempos de reposición de polímero son altos (un mínimo de cuatro horas), lo que obliga a tener la máquina parada.
  • Los sustratos texturizados aumentan el riesgo de fallo en la impresión.
  • No existe una guía de color Pantone estándar. La formulación depende de cada fabricante, del tipo de tinta y de la aportación elegida (anilox).
  • Las tintas de base solvente exigen la instalación de sistemas de seguridad y de tratamiento de residuos adicionales.
  • Consumo de tinta elevado: un mínimo de 3,5 cm3 por m2.
  • Espacio de color inferior al offset, que limita la cantidad de colores a utilizar en cuatricromía. La curva de ganancia de punto destaca en las medias tintas, pero es crítica en las zonas claras y las sombras.

Offset húmedo semirrotativo

El sistema offset es el más utilizado en impresión comercial, edición, prospectos y folletos publicitarios, y, en general, en todos aquellos trabajos que requieran la máxima calidad. Debido a los bajos costes de preimpresión y a la mayor exigencia de calidad por parte de los clientes, en los últimos años se ha empezado a utilizar también para la impresión de etiquetas.

La tecnología semirrotativa evita la necesidad de disponer de diferentes formatos de impresión y está condicionada por pocas variables:

  • Una buena solución de mojado: agua tratada, no muy dura, con PH dentro de las especificaciones y a temperatura de entre 15 y 17ºC.
  • Correctos nivelación, ajuste de presiones y paralelismos de los rodillos.
  • Equilibrio entre el agua y la tinta estable durante la impresión.

Los puntos flacos del offset son la baja aportación de tinta, que, para barnizado, requiere la incorporación a la máquina de una unidad flexográfica; y un desperdicio algo superior a la flexografía, debido a que se trata de una impresión indirecta. Los puntos fuertes, en cambio, son numerosos:

  • Buena cobertura de color, garantizada por baterías de veinte rodillos con tres dadores de tinta, y la alta pigmentación de la tinta UV.
  • Buena estabilidad de color durante el tiraje.
  • Calidad de imagen excelente sobre cualquier sustrato.
  • Acabados en línea.
  • Costes de preimpresión muy económicos: una plancha offset es entre quince y veinte veces más barata que un polímero flexográfico.
  • Con un único formato de impresión, posibilita cualquier avance en las etiquetas entre 200 y 400 mm, en incrementos de 1 mm.
  • Permite la reproducción de cualquier color, independientemente de tramas y fondos.
  • Los tiempos de limpieza son muy reducidos.
  • Riesgo mínimo de deterioro en las planchas durante la impresión.
  • Tiempo de reposición muy rápido (10/15 minutos).
  • La impresión sobre frontales texturizados ofrece la misma calidad que sobre cualquier otro material.
  • Existe una guía Pantone de color estándar.
  • Los residuos de tinta son mínimos.
  • Consumo de tinta muy bajo: 1,2 cm3 por m2.

Impresión digital

La impresión digital es tradicionalmente el sistema elegido para tiradas cortas, pues es la más rentable en cantidades inferiores a los 250/300 m2, o 750/900 metros lineales de material con anchura de 330 mm. Normalmente, las empresas no la utilizan como tecnología principal, sino como complemento a los equipos offset o flexográficos.

Algunos de los inconvenientes que presenta son:

  • Baja disponibilidad de materiales: la mayoría requieren un tratamiento previo, y no todos están preparados para este tipo de impresión.
  • Los colores Pantone solo se reproducen con fidelidad en selecciones hexacrómica y heptacrómica.
  • Los acabados necesitan una segunda operación, lo que obliga a disponer de una máquina de finishing.
  • Existe una dependencia total con el fabricante del equipo, para tintas, consumibles y complementos.

La conclusión es, como adelantábamos al inicio del artículo, que el sistema offset semirrotativo ofrece la mejor calidad al menor precio y con menos condicionantes a tener en cuenta. Las máquinas Brava de Rotatek responden a las exigencias del mercado para la impresión de etiquetas, y permiten acabados tanto en bobina como en hojas cortadas (muy útil para etiquetas de papel).